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USA (1947 - ). Productor y director norteamericano nacido en 1947 en Newport Beach, California. Uno de los más exitosos productores de Hollywood asociado a un impresionante porcentaje de los más importantes films americanos. En 1984, con su esposa Kathleen Kennedy y Steven Spielberg, funda Amblin Entertainment, una de las compañías de producción de la industria que han resultado mas exitosas. Su primera producción fue LOS CAZADORES DEL ARCA PERDIDA (1981), que significó el inicio de su colaboración con George Lucas, Spielberg y Kennedy. Continuó con la producción, junto con Lucas, de las secuelas INDIANA JONES EN EL TEMPLO DE LA PERDICIÓN (1984) e INDIANA JONES Y LA ULTIMA CRUZADA (1989). También el trío produjo las series VOLVER AL FUTURO (1985, 1989, y 1990). Estos son algunos ejemplos seleccionados de los muchísimos éxitos realizados en colaboración con realizadores diversos como Robert Zemeckis, Joe Dante, y Martin Scorsese. Marshall también se ha probado a sí mismo como director de películas de entretenimiento de gran escala comenzando con la comedia de suspenso ARACNOFOBIA (1990). Previamente había trabajado como director secundario en películas como ¿QUIEN ENGAÑO A ROGER RABBIT? (1988), VOLVER AL FUTURO (1985), SIEMPRE (1989),INDIANA JONES EN EL TEMPLO DE LA PERDICIÓN (1984) e INDIANA JONES Y LA ULTIMA CRUZADA (1989). También ha dirigido comerciales para la TV. Marshall ingresó al negocio como un protegido de Peter Bogdanovich a quien conoció en una fiesta de cumpleaños de la hija del director John Ford, un amigo de su familia, y que lo invitó a trabajar en distintas tareas (decoración de escenarios, preparar emparedados, aparecer en un pequeño papel,...) eter Bogdanovich en cinco películas, se convirtió en un productor de los proyectos dirigidos por Orson Welles, THE OTHER SIDE OF THE WIND (comenzado en 1970, pero inconcluso por la muerte del director); Scorsese, THE LAST WALTZ (1978) y de Walter Hill, THE DRIVER. Marshall se separa de Amblin en 1991 y forma la Kennedy/Marshall Company. Realiza su segunda producción como director, VIVEN (1993), logrando transformar un tema potencialmente desagradable en una película inspirada y de buen gusto que cayó sorprendentemente bien a todas las audiencias. Nuevamente demostró su manejo de los efectos especiales con CONGO (1995), una aventura de alta tecnología en la jungla adaptada de la novela de Michael Crichton.
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